Cuando hablamos de Marketing Digital estamos considerando la conjunción de distintas herramientas tecnológicas que, coordinadas mediante una buena estrategia, nos ayudarán a lograr nuestros objetivos comerciales.
No obstante, existen varios factores tales como nuestras prácticas diarias, las experiencias acumuladas fuera de la red, las modas y tendencias que observamos en las redes o bien, el desconocimiento del mismo tema, que nos orillan a llevar acciones cuasi mecánicas que muchas veces consideramos que son correctas, pero que en realidad no lo son y, como si fueran malos hábitos, cuesta mucho el dejar de llevarlas a cabo.
- Querer vender. Si bien nuestra actividad digital debe tener un enfoque comercial, es una realidad que “a nadie le gusta que le vendan, pero a todos nos gusta comprar”. Prácticas como el utilizar redes sociales para enlazarte con extraños e inmediatamente querer venderle tus productos generan rechazo. En lugar de esto, es recomendable enlazarte con otras personas para abordar algun área de oportunidad que tu producto o servicio pueda satisfacer. De forma que no sientan que les estás ofreciendo productos o servicios a la venta, sino que les ofreces información y contenido útil que despierte en ellos el deseo de seguir conociendo más y, eventualmente, comprar.
- Publicar sin estrategia. Muchos negocios aún sienten que las redes sociales, al ser gratuitas, no necesitan más que publicar sus productos e impulsarlos un poco para tener éxito. Esto eventualmente termina evidenciando que no es correcto. Es necesario trabajar sobre una estrategia o una metodología que considere todo lo necesario para poder conectar con tu comunidad. Para esto es muy importante conocer, no solo tu producto o servicio, sino a tu audiencia y generar contenido de valor.
- Pensar que las redes sociales son para mi negocio. Un error muy común es tomar decisiones en base a gustos personales de quien tiene ese poder de decisión, en lugar de considerar los gustos del target y los objetivos de la plataforma a utilizar. Lo que publiques en cualquier elemento del Marketing Digital (no solamente redes sociales) no es para ti ni para tu negocio. Es para la gente (para que te conozca, para que reciba tu mensaje, para que se identifique contigo).
- No responder. Los mensajes y los reviews son importantes y, tanto si recibes un email como un comentario en tu fanpage, es necesario estar al pendiente y responder lo más rápida y acertadamente posible.
- No invertir (o invertir poco). Gracias a COVID-19, la integración del Marketing Digital se ha acelerado para todo tipo de negocios. Esto significa que hay más competencia. Es muy recomendable establecer objetivos económicos realistas y medibles que te garanticen un alcance y dividirlos correctamente entre impulsos y campañas, pues tienen distintos objetivos.
Por último, el mayor error que cometemos va relacionado con el ego y la creencia de poder hacer todo. El Marketing Digital involucra muchas herramientas donde cada una es tan importante como la otra y cada una requiere su tiempo y grado de experiencia. Este es el error más peligroso y la solución es tan simple como pedir ayuda a quien realmente te puede ayudar.